Para poder amar y respetar al niño, los padres o maestros deben amarse y respetar a sí mismos, dedicándose tiempo para crecer como personas; asistir a cursos, talleres y conferencias sobre desarrollo humano; escuchar en la radio o ver en la televisión o en cualquier medio de comunicación programas sobre el crecimiento personal que hablen sobre el comportamiento saludable físico y mental del individuo, y si es necesario, asistir a terapia psicológica para descubrirse como personas valiosas. Sólo así, cuando hayan aprendiendo cómo quererse, cómo consentirse y cuidarse, entonces estarán capacitados para proyectar amor, dedicación, cuidado y entrega a los hijos y alumnos.
°No descargan sobre el niño o el alumno el coraje que siente el adulto, castigándolo o reclamándole sus fallas, tropiezos o mal comportamiento; los padres o el maestro deben ser justos con ellos, como queremos que sean con nosotros. Tienen que ser pacientes, confiar en ellos a pesar de que presenten una conducta indebida; se les debe retroalimentar sobre cuál es la consecuencia de sus hechos, pero sin etiquetarlos ¨Eres un niño feo, desobedientes, malo,… ¨ni castigarlo, y sobre todo evitar que se deteriore su autoestima.
° Transmitir al niño seguridad y manifestarle que la conducta indebida que realizó se puede cambiar para su bienestar, que lo que aprendió fue equivocado y que hay otro tipo de comportamiento que no va a perjudicarlo, que al contrario, le va a servir para estar bien con el, porque sabe respetarse y respetar a los demás.
° Si se quiere a los hijos y alumnos, se les necesita disciplinar, no castigar, ya que, como hemos visto, al castigar estamos enviando un mensaje al niño: que se le aparta por considerarlo un ser inadaptado o antisocial. En cambio, al disciplinarlo se le da un mensaje positivo: ¨Porque te amo, quiero que tú y yo hagamos un esfuerzo para convivir con acuerdos, sin molestar a nadien ni alterar las reglas que nos rigen¨.
NORMAS DECONDUCTA
- MENTIR
- HURTAR
- GOLPEAR
- RESPETAR
- AMAR
- AYUDAR
- COOPERAR
- PEREZA
- CHISMEAR
- BROMAS PESADAS
- LIMPIESA
- HABLA OBSCENA
- SALUDABLE
- PERDONAR
- TRABAJAR
Normas y limites
Después de analizar la serie de elementos necesarios para que el niño establezca un comportamiento estable y saludable en su entorno social, ahora explicaremos la importancia de introyectar en el niño preescolar normas y límites para una convivencia sólida, firme y estable.
Padres y maestros enfrentan un reto importante a la hora de disciplinar a sus hijos y alumnos, se preguntan qué límites y normas se le debe imponer sin dañarlos; para ello se requiere establecer una serie de reglas que tiene que conocer para saber cuándo estas actuando incorrectamente y cuándo no, para que aprendan por sí mismos lo que está bien y lo que está mal, utilizando estrategias que no necesariamente tienen por qué basarse en el castigo, más bien inculcarle con amor, cariño y afecto la adhesión a las pautas de un buen comportamiento.
Para fines de este libro, entenderemos como limites las restricciones que les imponemos a los niños, con el propósito de que el menor conozca y entienda hasta dónde puede llegar y qué es lo que se espera de él, y como norma el conjunto de reglas que rigen su comportamiento; esto le permitirá al niño saber cómo y cuándo se de hacer algo y cuándo no. Asimismo, le da la oportunidad de reconocer entre lo bueno y lo malo, y cómo tener claras las pautas de comportamiento; cabe señalar que estos límites son indispensables para el crecimiento psicosocial y psicoafectivo del niño en su desarrollo y crecimiento, debido a que le aportan seguridad y confianza, y además le ayudará a tener clara la reacción de sus padres y maestros ante ciertas situaciones en las que es confuso el comportamiento.
Tanto los padres como los maestros deben ser conscientes de que para formas hijos o alumnos exitosos, desde temprana edad se tienen que establecer normas y límites, con el propósito de que el niño conozca y entienda hasta dónde puede llegar en su comportamiento y qué es lo que se espera de él; para estos, las normas deben estar bien definidas y contemplar la posibilidad real de que estás sean ejercidas.
En caso de que se alteren las normas, el niño también debe saber que estos trae consecuencias negativas; por otro lado los padres y maestros tendrán que ser congruentes con la manera de imponer límites y normas accesibles, provechosos y benéficos para el niño, conductas que le hacen pensar sus padres lo quieren, que están al pendiente de su formación y de su comportamiento, esto les generará seguridad, orden, disciplina y cooperación en el cumplimiento de los límites y normas preestablecidos.
Sugerencias para imponer normas y límites al preescolar
- En ocasiones negarle al niño lo que quiere o desea es favorable debido a que le genere ciertas frustración al no obtener lo que pretende, esto con la finalidad de que gradualmente aprenda a desistir de sus deseos, que sepa que no todo se puede obtener, que habrá momentos que se enfrentará a decepciones en su vida diaria, y así tenga herramientas para reaccionar ante estas frustraciones para que no afecten su seguridad y autoestima, ya que al no haber vivido estas experiencias, el niño supondrá que no vale porque no puede conseguir lo que quiere ya que todo le daban.
- Describir las normas y los límites minuciosamente, que sean claros, precisos y razonables; deben darse por anticipado, para que el niño sepa de qué se trata. Tienen que administrarse constantemente para que se interioricen, recordarlos todos los días; al aplicarlos hay que estar tranquilo, de buen humor, si el niño no cumple, se le tiene que imponer una sanción que sea directamente proporcional a ña falta. Esto ayudará a que el niño cimente sus propias reglas; para la introyección de éstas, es preferible realizarla mediante el juego, de manera divertida, pero con las características propias de la norma o los límites.